El ciclón de tus ojos espectadores del milagro de
Vernos en una zona neutral para parir el diálogo…
Uno de bocas cerradas y ojos que parecen rosas
de plástico en el funeral de las melancolías.
Veniste en el momento justo,
Justo antes de las palabras de despedida
Que no despiden a nadie.
Bienvenida con tus ojos y tus silencios,
Con tus ciclones de cinco de la tarde
En la sala de recepción de esta funeraria
En donde solemos juntarnos
a celebrar que la cabrona vida sigue
vivita y jodiendo.
2 comentarios:
Uy, preciosos poemas, que nos tocan siempre, Marré, que siempre te agradecemos.
¿Quién no quisiera que le dieran una bienvenida así?
Abrazos,
Alma Karla
y en todo caso (agregaría yo) a celebrar que nos sigue juntando
saludos
Publicar un comentario